Primer y último disco en el siglo XXI de la banda norteamericana. Estamos ante un discazo de tomo y lomo. Fusionando sonidos rockeros de los sesenta con el incipiente heavy metal y con un cantante con una voz clarísimamente influenciada por Robert Plant, Granicus se saca del sombrero una obra maestra de LP. A pesar de todo tuvieron muy poco apoyo por parte de la discográfica y se desbandaron hasta los dosmiles cuando se reunirían para sacar algunos discos más. Tengo la sensación de que este es un grupo que si hubiese sido europeo hubiese triunfado muchísimo más. Tiene mis dieses máximos.
Fuente: Discogs |
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